LENTES CORRECTORAS
Cristales graduados disponibles para personas miopes, con -2,00 a -6,00 dioptrías
Límites de utilización recomendados por nuestro oftalmólogo asesor:
El uso de lentes corregidas proporciona mayor confort visual para los deportistas con miopía. Elige una corrección inferior o igual a tu prescripción.
El uso de gafas no supone ningún riesgo de degradación de la agudeza visual para los niños con más de 8 años, sin embargo, está ESTRICTAMENTE DESACONSEJADO para los niños menores de 8 años.
VAHO
La aparición de vaho depende de varios factores, la diferencia de temperatura entre el cuerpo y el agua, el índice de humedad, etc.
El desgaste por fricción es una de las causas principales.
Si aparece vaho, sumerge los cristales en el agua; se volverá a formar una capa protectora.
Al cabo de cierto tiempo, es normal que las prestaciones del tratamiento antivaho disminuyan.
Te proponemos un rotulador para reactivar el tratamiento antivaho y alargar la vida útil de las gafas.
CÓMO AJUSTAR LAS GAFAS
Unas gafas de natación adaptadas a la morfología de tu cara no necesitan un ajuste importante.
Unas gafas demasiado apretadas podrían provocar incomodidad, marcas e incluso la entrada de agua.
No es preciso presionar los cristales con las manos; un ligero efecto de ventosa suele bastar para que no entre agua durante las sesiones de natación.
Lo ideal es que las correas pasen a 2 o 3 cm por encima de las orejas.
Así se optimiza la sujeción y el confort de las gafas.
MANTENIMIENTO - PRECAUCIONES
Recomendamos:
- aclarar las gafas (únicamente si es necesario) sumergiéndolas simplemente en el agua;
- evitar los chorros potentes de agua en la cara interna de los cristales;
- guardar las gafas en su estuche entre cada sesión para evitar dañar los cristales (protege el tratamiento antivaho de la cara interna y evita el rayado en la cara externa);
- evitar la exposición a temperaturas superiores a 60 °C.
NO TOCAR/FROTAR EL INTERIOR DE LOS CRISTALES