El extracto de té verde ha sido usado durante años como un producto efectivo de cara a la pérdida de peso y grasa. Como ya hemos visto, éste está compuesto a su vez por catequinas, entre las cuales se encuentra el EGCG, el cual ha demostrado tener un efecto positivo en la oxidación y pérdida y grasa, consiguiendo disminuir el peso corporal. En estudios científicos se ha comprobado que la oxidación de grasas se ve incrementada tanto en condiciones de reposo como con la realización de ejercicio físico.
Uno de los mecanismos propuestos para el funcionamiento de las catequinas del té verde a la hora de incrementar la oxidación de grasas, iría ligado al efecto inhibitorio sobre la catecol O-metiltransferasa, una enzima que degrada catecolaminas como la noradrenalina, prolongando así la liberación de esta mediante la actividad simpática del sistema nervioso.
A pesar de ello, otros mecanismos han sido propuestos. En este sentido, los cambios en la expresión de los genes del metabolismo de las grasas que se dan al consumir extracto de té verde, también se ha propuesto como mecanismo que podría explicar efectos encontrados tras la consumición de este producto.
A pesar de todo esto, una alimentación adecuada y una correcta realización de ejercicio físico, deben ser la base principal en una etapa de pérdida de peso y grasa.
Este producto no solo se queda aquí, sino que también ha demostrado tener beneficios para la salud humana, por ejemplo, teniendo impacto positivo a nivel cardiometabólico (mejora del perfil lipídico, efectos positivos en la sensibilidad a la insulina, etc).
En resumen, el consumo del presente producto supondrá una ayuda en tu etapa de pérdida de grasa, haciendo más fácil la consecución de dicho objetivo. Es más, el extracto de té verde se ha propuesto y usado en numerosas ocasiones como tratamiento no solo para el sobrepeso y la obesidad sino también para patologías metabólicas