Diseño
Nuestros equipos han elegido la tecnología de termosellado (sin costuras) para este balón de fútbol playa , lo que garantiza una esfericidad perfecta y una mayor precisión en los tiros. Además, esta tecnología garantiza una gran impermeabilidad. Para optimizar la esfericidad del balón, hemos elegido una cámara laminada (tejido pegado alrededor de la cámara de látex), lo que garantiza un inflado más duradero.
Construcción exclusiva
Sabemos que durante los partidos a menudo la diferencia la marcan los detalles. Hemos prestado mucha atención a la estabilidad de la trayectoria en este balón BS9, para que los jugadores y los porteros puedan capturarlo mejor en el aire. Para ello, hemos probado diferentes tipos de paneles exteriores y hemos elegido el que obtuvo los mejores resultados. Este diseño con 12 paneles es exclusivo de Kipsta.
Test calidad
Para responder con gran precisión a las exigencias del fútbol playa en competición, hemos sometido este balón a numerosas pruebas en laboratorio. A continuación te detallamos cada una de estas pruebas.
Peso
Entre 430 y 445 gramos en talla 5.
Circunferencia
Entre 68,5 y 69,5 cm.
Esfericidad
Variación de la media medida: 1,5 % máximo
Medimos las esfericidad del balón en 4500 puntos distintos y observamos las diferencias.
Si hay una diferencia superior al 1,5% (Estándar FIFA PRO), nuestros ingenieros tienen la misión de mejorar la esfericidad para garantizar un rebote regular.
Pérdida máxima de presión
Inflamos el balón según la presión recomendada (0,8 bar).
72 horas después, el balón no debe haber perdido más del 15% de su presión, es decir aproximadamente 0,1 bar. La presión al cabo de 72 horas debe ser entonces de aproximadamente 0,7 bar.
Esto también quiere decir que al cabo de unos días es completamente normal que un balón pierda presión.
Absorción del agua
En el laboratorio, simulamos las condiciones de juego bajo la lluvia dejando el balón en 2 cm de agua y aplicándole 250 compresiones y rotaciones constantes.
Al finalizar el test, el balón no debe haber incrementado su peso más de un 10%, es decir 40 gramos en el caso del BS9. Esta es una de las ventajas del proceso de termosellado; la absorción de agua está limitada en comparación con otros procesos (el cosido a máquina por ejemplo).
Rebote
Entre 135 y 155 cm con una diferencia máxima de 10 cm entre el rebote más alto y el rebote más bajo por balón. Cada balón se suelta 10 veces sobre una placa de acero desde una altura de 2 metros.
Conservación de la forma y la presión
La prueba más exigente a la que es sometido este balón es el test del disparo en máquina.
Soporta 2500 disparos contra una pendiente de hormigón a 50 km/h a una distancia de 2,5 m.
Al finalizar este test, comprobamos: - el estado general del balón: las costuras deben resistir a este test.
- la circunferencia: no debe haber incrementado más de 1,5 cm.
- la esfericidad: no debe haber variado más de un 1,5%.
- la presión: el balón no debe haber perdido más de 0,1 bares.